Las extensiones de pestañas son la alternativa ideal a las pestañas postizas, no sólo por los resultados, ya que no se trata únicamente de poder llevarlas una noche, sino por la comodidad de no volver a usar el rimmel y porque te aguantan todo un mes y después las puedes volver a rellenar siempre que quieras.
Con las extensiones de pestañas se duplica la cantidad, con lo que vas a lucir una una mirada mucho más frondosa e intensa.
En función de cada persona la esteticista diseña tus extensiones, de modo que se consiga levantar la mirada y no tener que aplicar máscara de pestañas mientras dure.
Dura aproximadamente un mes, aunque a partir de la segunda o tercera semana (en función de cada persona), comienzan a debilitarse y caerse. Para hacer que duren más, puedes incluir un tratamiento sellante cada día.
El tratamiento se hace en unos 90 minutos Pegará pestaña a pestaña sobre la natural, con una extensión extra de uno o dos milímetros más que la pestaña natural.
En definitiva no requieren de cuidados especiales, aunque puedes hacer que duren más, si incluyes en tu rutina diaria un tratamiento sellante especial (mañana y noche) y las peinas cada día con suavidad.
Sí, puedes hacer rellenos a partir de la segunda semana. También en la tercera y a partir del mes.
Depende de la densidad de pestañas colocadas por ojo